ZAHARAÏ NACIÓ DE UN SUEÑO
Nací en un rincón humilde de Argentina, donde aprendí que la carencia no define el destino. Desde niña tuve una visión: un lugar luminoso, cálido y desconocido que un día reconocí al llegar a Dubái. Ahí entendí que la vida también habla en silencios y que la Fe puede llevarte adonde tus ojos aún no ven.
Mi camino no fue lineal. Crecí sin estructura, sin apoyos y con más preguntas que respuestas. A los 16 salí de casa con una mochila, y años después me formé como psicóloga, atravesé fronteras y conocí mundos que nunca imaginé. Pero Dubái fue diferente: fue el lugar donde todo hizo sentido.
Descalza en el desierto escuché una palabra que no conocía: Zaharaï.
“La que florece.”
“La que resplandece.”
Comprendí que ese nombre no era para una marca; era un mensaje. La creación nacida del desierto reflejaba mi historia y la de tantas personas que renacen desde su propia tierra interior.
Zaharaï existe para recordarte eso:
que puedes florecer incluso en tus arenas más áridas,
que el cambio verdadero empieza dentro,
que volver a ti es el acto más poderoso.
Esto es Zaharaï.
Un ritual para recordarte quién eres, incluso en los días que lo olvides.
— Alexa